Jorge Drexler: “Sin esperanza es muy difícil escribir”

Publicado el 27 - 01 - 2021 | Por: Felipe Sánchez Hincapié

Hace ya varios meses que Jorge Drexler protagonizó uno de los conciertos más íntimos y surrealistas en su extensa trayectoria artística. Fue en el Teatro Popular Melico Salazar de San José, Costa Rica, a donde había llegado para realizar varias presentaciones que, por la pandemia de COVID-19, tuvo que cancelar al instante. Pese a la tristeza por no poder encontrarse con su público, Drexler se arriesgó a transmitir por redes sociales un concierto en el que solo estuvo acompañado por las butacas del teatro. Sin aplausos, pero con miles de likes, el autor de “Todo se Transforma”, “Al Otro Lado del Río” —con la que ganó el Oscar a mejor canción original en 2005— y “Universos Paralelos”, inspiró a otros artistas a hacer lo mismo y, desde ese momento, la música ha sido la compañía de muchos en estos días difíciles.

Después de este inusual concierto, el cantante uruguayo regresó a España, donde reside con su esposa, la actriz y cantante Leonor Watling. Ambos dieron positivo para coronavirus y lograron recuperarse satisfactoriamente en casa, pero un vaivén de emociones absorbió por completo a Drexler, al punto de no sentir la necesidad de escribir canciones.

“La verdad es que he pasado por muchas fases durante la pandemia, como he visto que la ha pasado mucha gente. He pasado por una fase de desconcierto y de inmovilidad. Los primeros meses, la parte más dura —al menos aquí en España— de la pandemia, entre marzo y mayo, los pasé completamente encerrado y estuve dos meses y medio sin salir por la puerta de mi casa. De hecho, pasamos la enfermedad en mi casa con mi familia en los primeros días en marzo. Entonces, como que eso absorbió mi manera de pensar completamente y en ese momento no sentí la necesidad de escribir más”, le contó a este medio durante una rueda de prensa virtual realizada en el marco del Hay Festival 2021, certamen cultural en el que tendrá una charla virtual con el escritor colombiano Juan Gabriel Vásquez el jueves 28 de enero a las 3:00 p.m.  

Aunque en Costa Rica alcanzó a escribir “Codo con Codo” —una canción con la que trató de dar un mensaje de esperanza en medio de la pandemia y que fue nominada a Canción del Año en los Grammy Latinos 2020—, Drexler confesó que se sintió “totalmente tomado por las circunstancias” y que, en vez de escribir, decidió vivir la nueva y extraña cotidianidad junto a su familia, más cuando llevaba tres años de gira y realizando alrededor de 260 conciertos. “O sea que, en primera instancia, tenía muchas ganas de quedarme en mi casa y de quedarme quieto”, recalcó.

Cuando la situación en España empezó lentamente a normalizarse, regresó a su lugar de trabajo para escribir nuevas canciones, aunque los cambios que vinieron con la pandemia hicieron que ello fuera una proeza.

“Me ha resultado muy diferente escribir en pandemia, no tiene nada que ver con la manera de escribir que tenía antes de que esto pasara. De alguna manera, hay como un borbollón de ideas, una sensación muy fuerte de que tengo muchas cosas para contar, porque esta es una situación que está marcando la vida de todos los que la estamos viviendo casi como ninguna otra; nos ha tocado vivir o nos tocará vivir en nuestro ciclo vital esto. Seremos la generación que pasó por esta pandemia. Y, sin embargo, ese mismo peso me dificulta mucho contarlo, de alguna manera, y, por otro lado, uno de golpe tiene muchas ganas de relatar esa experiencia tan traumática y de golpe [no] tiene ganas ni escuchar hablar de eso”.

De ahí que, como contó más adelante, echara de menos a una de sus musas, la esperanza, esa luz al final del túnel que necesita para escribir una canción así sea triste y que le da alguna finalidad a lo que está haciendo. “Sin esa esperanza es muy difícil escribir. Aunque sea para escribir triste, uno tiene que tener un punto de luz. Creo que esa esperanza genérica, no sólo en el futuro, sino en lo que uno escribe, la fe en lo que uno escribe, no es una fe religiosa, pero es la confianza en que eso sirve para algo, de que eso va para un lado. Eso para mí es uno de los motores principales”.

En medio de la ilusión y la desilusión, la esperanza y la desesperanza, la apertura y la rebeldía, Drexler logró preparar un repertorio diverso que incluye colaboraciones “muy inesperadas y muy inusuales” con otros artistas, como una con el reconocido cantante de música urbana C. Tangana que aparecerá en su nuevo disco. Aunque no reveló más nombres, sí aseguró que estas colaboraciones abrirán “fronteras nuevas y caminos nuevos”.

Alejado de las etiquetas, dijo no sentirse a gusto con la palabra cantautor, ya que suena “a algo así como cantamañanas; esa cosa del verbo seguido del sujeto y las palabras compuestas con ese diptongo en el medio. Es una palabra fea cantautor, en mi opinión”, pero ello no quiere decir que no le guste el trabajo de quienes sí aceptan que les digan cantautor, como Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina y Silvio Rodríguez —de quienes se declaró fanático y han sido sus mayores influencias— o el colombiano Pala, con quien ha realizado varias colaboraciones y quien consideró “el mayor sonetista vivo que hay en español hoy en día”.

“Pero la palabra cantautor no me gusta y tampoco me gustan mucho los casilleros en general. Eso es algo sobre lo que canto mucho: no me gustan las clasificaciones, no me gustan los tops 5, no me gustan las jerarquías asociadas con las disciplinas artísticas, a pesar de que he recibido un montón de premios y me considero muy afortunado. Pero yo no los he inventado, me los han dado y los he agradecido mucho. Siempre he desconfiado de la jerarquización respecto al arte”.

Aprovechando su participación en el Hay Festival 2021, que se realizará de manera virtual hasta el 31 de enero y que tiene como sede al municipio de Jericó y las ciudades de Medellín y Cartagena, Drexler afirmó que su aproximación a la literatura —presente en las letras de sus canciones— ha sido desde la humildad, ya que no tuvo una formación literaria sistemática y ni siquiera es un lector exhaustivo, sino uno muy apasionado “que de golpe se entusiasma con un autor o con una temática, y lee todo lo que le cae en las manos de manera muy compulsiva, pero así como empieza deja de repente los libros”. Por ello, su formación literaria ha sido completamente autodidacta a través “del aprendizaje de la relación entre la métrica poética y la métrica de la canción, sobre todo, a través de los géneros de métrica clásica, del octosílabo, que gobierna nuestro idioma español, el verso, y del endecasílabo también, que es el que estructura el soneto”.

En cuanto a la charla que tendrá con Juan Gabriel Vásquez, comentó que espera aprender mucho de un escritor al que admira y considera su amigo, aunque no ocultó su deseo de estar en Cartagena —“ay, qué ganas de estar en Cartagena”— brindando, conociendo gente y charlando, “que es lo que más me gusta hacer”. “Espero que, aunque sea en la distancia, profundicemos en conocernos un poco más como personas, además de aprender sobre literatura y, por qué no, aprender más de lo que hago, de las canciones”, concluyó.